miércoles, 28 de agosto de 2013

DRONES PARA INSPECCIONAR MACHU PICCHU

Before Machu Picchu
Machu Picchu © Wikimedia commons
Hace unos días nos hicimos eco en Plaudite facebook del uso de "drones" en Perú para fines arqueológicos.

Nada nuevo en aquella noticia respecto de la habitual técnica de prospección aérea vigente desde los principios de la aviación. Nombres como J. Bradford, J. Baradez o R. Agache son altamente evocadores para los arqueólogos. Sin embargo, desde que puede colgarse una cámara a cometas, veleros de aeromodelismo sin motor o maquetas de avión, su uso se ha democratizado y no hay yacimiento que no disponga de buenas imágenes aéreas verticales. Pero el énfasis que se hacía en aquella noticia en relación con la privacidad de las personas nos hizo prestar una mayor atención: "En Perú no existe regulación para la aplicación civil de los drones, lo cual permite impulsar todo tipo de proyectos privados, pero el gran problema, admitió Flores, es que su uso para vigilancia urbana podría atentar contra la privacidad de las personas, lo que hace necesario una regulación".

Dron © El Sol diario online
La respuesta ha venido pocos días después en el periódico en línea El Sol en su artículo Perú utilizará drones para proteger su arqueología donde se afirma que se van a usar "los drones en tareas de vigilancia con el objetivo de proteger yacimientos arqueológicos de posibles expolios o malos tratos provocados por la explotación minera (sin control) o por efectos de la especulación urbanística (sin respetar el entorno o hallazgos arqueológicos)". La cuestión a la que no tenemos respuesta es si existe una ley y una reglamentación (suponemos que sí) y quién se ocupará de supervisar las imágenes recuperadas por los aviones sin piloto. Tampoco está claro quién está detrás de la idea: "El Ministerio de Cultura de Perú es uno de los impulsores de esta idea... El Gobierno correrá con los gastos de adquisición de los drones..." o "Un grupo de arqueólogos de Perú ha decidido aprovechar esta tecnología para luchar contra el expolio y el maltrato de los yacimientos arqueológicos de Machu Picchu".

Lo que si está claro es que la inquietud del Ministerio de Cultura peruano es debida al crecimiento económico y las profundas transformaciones que conlleva en el territorio y en las ciudades: "Según los responsables de la iniciativa, la economía de Perú ha crecido una media del 6,5% anual en la última década y esta activación de la economía ha provocado que aumente la actividad del sector minero y de la construcción (y esta actividad no siempre ha sido respetuosa con los tesoros arqueológicos del país)".

Nada que no hayamos vivido en nuestra geografía. Ser país emergente siempre tiene un precio para el patrimonio. Nos tememos que habrá que hacer algo más para proteger el patrimonio arqueológico.

viernes, 9 de agosto de 2013

CAN BLAI, ARQUEOLOGÍA Y PARTICIPACIÓN CIUDADANA

© Gourguen Davtian CNRS-CEPAM
Ricardo González Villaescusa
Entre los días 8 y 28 del pasado mes de julio he tenido la oportunidad de hacer plenamente aquello para lo que me he formado en los últimos 30 años. Con 18 años vine a Formentera a excavar bajo la dirección de Jordi Fernández, director del MAEF, en el poblado del Cap de Barbaria y salí de Formentera con 19 años y la certeza de que haría lo posible por ser arqueólogo. El pasado 8 de julio tuve la sensación de haber cumplido dicho objetivo y de “volver a casa”. A esa sensación ha contribuido de forma decisiva la inestimable cooperación del Consell Insular de Formentera, personificada en la consellera Sonia Cardona y en el técnico de patrimonio Jaume Escandell.

Los asentamientos de la antigüedad se ubicaban en un espacio y hoy los estudiamos insertos en un territorio de configuración distinta. Ese territorio está poblado por gentes. Algunos, quizá una mayoría, son indiferentes al pasado. Otros desean conocer más sobre aquellos que les precedieron en la ocupación del espacio. En las tres semanas que han durado los trabajos de campo hemos prestado una especial atención a estos últimos. Hemos abierto las puertas del yacimiento de Can Blai a todos aquellos que desearan verlo de cerca y entender nuestro trabajo y hemos explicado lo que hacíamos con ese yacimiento que les pertenece por ley y por afecto. También hemos hecho un inhabitual esfuerzo en comunicación por medio de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (NTIC), gracias a los videos diarios que colgábamos en nuestro sitio web donde se daba cuenta de nuestro trabajo y descubrimientos cotidianos.

No menos de 30 personas han participado en este proyecto. Especialistas de la cerámica, la arquitectura o de la dispersión de los asentamientos y de los métodos de registro arqueológico y topografía han trabajado para que dispongamos de una “explicación” del castellum de Can Blai, de su construcción, de su posición en la isla y en el Mediterráneo. La mitad aproximadamente, ha pasado las tres semanas aprendiendo a excavar, inventariar cerámica, prospectar, dibujar cerámica o muros… La labor no es pionera pero hemos querido hacer un esfuerzo para que el alumno en formación partiera de Formentera con un valor añadido: se han impartido 18 horas de clases magistrales, 20 horas de trabajos dirigidos y 100 horas de prácticas en el terreno, lo que equivale a unos 5 créditos ECTS del Espacio Europeo de Educación Superior.

Can Blai tuvo un uso tras su conclusión a finales del siglo III o principios del siglo IV d.C. y tuvo una puerta principal consecuente con el tamaño del edificio. Pero nuevos, y trascendentes, interrogantes han surgido al abrir la tierra que todavía cubre el yacimiento y que han quedado sin respuesta, lo cual es una excelente noticia. Existirán otras campañas de trabajos de campo en 2014 y 2015 con seguridad. Pero de la misma manera que hemos contado con nuevas vías de financiación privada gestionadas por la Fundación de la Universidad de Niza, queremos incitar a la participación activa de los ciudadanos en la comprensión y elaboración del pasado de su territorio. Queremos construir junto a la sociedad civil un nuevo “proyecto arqueológico”  donde caben nuevas formas de relacionarse con el patrimonio, por parte, tanto de los expertos como de los profanos, de forma que accedamos a resultados de la investigación como una traducción para que los restos arqueológicos puedan ser leídos por todos, incluidos los arqueólogos que no hayan participado directamente en la investigación, en un nuevo uso público de la historia. Una cita a la que emplazamos al tejido social de Ibiza y Formentera.

lunes, 5 de agosto de 2013

¿VALENCIANS O MAGRIBINS?

Imposta de transició. Sant Feliu de Xàtiva
Josep Vicent Lerma
LEVANTE-EMV, 25 de julio de 2013

La resurrecció de l'etern i bord debat nominalista valencià, materialitzada en titulars de premsa del tarannà de "Questió de noms" d'Enric Sòria o "Un nom per a un país" de Joan Garí, davant d'altres cabuderies secessionistes com ara "Les coses pel seu nom", revela tal com afirmava el secretari de l'Agència Europea per a la Cultura José Vidal Beneyto allà per l´albirar del segle XXI, que la identitat privativa dels valencians encara es troba absolutament irresolta, enfront de la incapacitat col•lectiva de fer conviure els elements diferencials del país: “la identidad valenciana es extraordinariamente complicada. Porque nosotros somos –olvidándome de lo antiguo- en parte judíos, en parte moros y somos catalanes” (Levante-EMV, 26-05-2000).

En aquest ordre de coses resulta d'escaient i beneïda memòria, la irreemplaçable contribució filològica del mestre de generacions d'arqueòlegs valencians Domingo Fletcher Valls, membre de primera hora de l'Institut d´Estudis Valencians en els anys esponerosos de la II República, que en el solemne discurs d'obertura del curs del Rat Penat de 1953-54, ja durant la Postguerra, consagrat significativament a "Els valencians pre-romans", va sostindre llavors amb el seu proverbial seny intel•lectual que: “Parlar del valencians d´abans de la vinguda dels romans, és una mica atrevit, puix que el nom de valencians sols es pot donar correctament als habitants d´aquestes terres a partir de la fundació de la ciutat epònima Valentia” (138 a.C).

Conflictes identitaris lingüístics respecte dels quals, segons la meua opinió personal vindria a ser molt il•lustrativa l'obra de Jean-Pierre Payot titulada "La Guerra de les Runes", en la que es postula la tesi de la instrumentalització nacionalista de l'arqueologia amb fins geopolítics "En l'origen, una entitat de naturalesa política, religiosa o cultural s'oposa a una altra respecte a tot o una part d'un territori..... Siga quin siga el context l'arqueologia sistemàticament fonamentará una mena de "dret històric".

Casuística ampla en que comptat i debatut, la disciplina arqueològica és cobejada espúriament per a certificar els drets prioritaris d'una de les bandositats sobre un territori donat, argüits damunt la base d'una pseudo-sujección de major antiguitat o una llengua ancestral el més remotament arcaica possible.

Així les coses i en un viratge, fins i tot un punt teatral, la recent publicació en PNAS (Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of Amèrica) d'una investigació científica que proba una diferencial diversitat genòmica dels europeus assentats en les voreres de la Mediterrània, en la que es descobreixen aportacions africanes i berbers dels últims tres-cents anys, no deixa de proporcionar pel que fa a la població de les terres valencianes la insospitada evidència genètica en relació als valors mitjans de la Península Ibèrica, d'un peculiar menor percentatge de l'aportació sefardita i d'un major pes dels cromosomes d'avantpassats magribins entre nosaltres (Levante-EMV, 22-02-2010), per cert just el contrari del bagatge genètic dels nostres veïns germans mallorquins, en certa manera en una confirmació contra pronòstic dels judicis culturals avançats a l'inici del professor Vidal Beneyto sobre la mestissa personalitat valenciana o l'assajada "Impura Natione" (1986) del revisioniste àulic Eduard Mira i el Damià Mollà, encara que més enllà del fang germinal de l´ADN heretat per qualsevol poble, no cal oblidar mai com els paradigmes de les identitats nacionals des de la visura de l’Arqueologia, son de veritat, en paraules de la catedràtica Carme Aranegui, un constructe històric, de cap manera natural, aparellat al llarg dels segles en el doble joc de “com es veiem des de dins i com ens veuen des de fora”.






miércoles, 26 de junio de 2013

LOS "CEREBROS FUGADOS" YA NO PERTENECEN A ESPAÑA


© Josep Berenguel Aparecido en eldiario.es
Recibí el mismo mail que la autora de este artículo y experimenté la misma sensación ante el tono de la misiva "entre ingenuo y entrometido". También "me incomodó del mensaje un cierto regustillo nacionalista. En el mundo científico no hay cabida para los nacionalismos".

Suscribo el artículo palabra por palabra.

Ricardo González Villaescusa
Catedrático de Historia Antigua y Arqueología de la Universidad de Nice - Sophia Antipolis

P. López García, El País, 24 de junio de 2013


La investigación que hace un científico es internacional, pero si tuviera que ser de alguien, sería del país y de las instituciones que la financian, que son las que lo hacen posible.

Soy española y trabajo como directora de investigación para el Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS). Vine a Francia en enero de 1995 y, salvo por un periodo de retorno de apenas dos años a una universidad española que me desalentó por su nivel de endogamia, he desarrollado desde entonces mi actividad investigadora en este país, donde actualmente dirijo un grupo de investigación en la Unité d'Ecologie, Systématique et Evolution de la Université Paris-Sud. Hace unos días recibí un mensaje de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT). En él, leí: “Me pongo en contacto contigo porque desde FECYT queremos poner en valor la ciencia española que se hace más allá de nuestras fronteras y reconocer así vuestros resultados científicos, en tu caso concreto, en Francia”. El mensaje seguía diciendo que, además, querían fomentar el establecimiento de redes de científicos españoles en el extranjero y me invitaban a participar en la divulgación de la ciencia y el establecimiento de una sociedad basada en la cultura del conocimiento, a facilitar colaboraciones entre los dos países y a ser portavoz de los investigadores españoles en el exterior.

Todo esto parece a priori muy loable, aunque confieso que no dejó de sorprenderme un cierto tono entre ingenuo y entrometido. Los científicos españoles en el extranjero somos ya suficientemente mayorcitos como para crear nuestras propias redes sin ayuda de algún burócrata de una administración repentinamente paternalista. De hecho, en el mundo científico éstas ya existen. Nuestra actividad implica hacer accesibles nuestros resultados a través de publicaciones, de comunicaciones en congresos y de internet. También me incomodó del mensaje un cierto regustillo nacionalista. En el mundo científico no hay (no debería haber) cabida para los nacionalismos. Las ideas científicas están por encima de las nacionalidades y de los individuos que las producimos. Pero, en fin, quizás era todo con buena intención. Pudiera ser.

Lo malo de la edad es que uno va perdiendo la inocencia y se va haciendo escéptico. Dice el refrán que uno sólo se acuerda de Santa Bárbara cuando truena. Como cuando hace unos años recibí en mi domicilio francés una tarjeta sanitaria de la comunidad de Madrid (dirigida entonces por Esperanza Aguirre) que me permitía el acceso gratuito a la atención médica cuando estuviera de paso por mi antigua comunidad de origen. Tras el estupor inicial, la lógica se abrió paso: se avecinan elecciones y todo voto (incluso los ganados inmoralmente) cuenta. No me equivoqué. ¿Sería posible que el mensaje de la FECYT fuera interesado? Una segunda lectura no me deja duda. Releo: “Queremos poner en valor la ciencia española que se hace más allá de nuestras fronteras”. Ciencia española. Ah, resulta que este paternalismo que nos aparece de pronto por parte de las instituciones españolas es interesado. Yo, y como yo todos los científicos españoles que trabajan en el extranjero (me consta que algunos otros han recibido el mismo mensaje), nos hemos convertido por decreto en adalides de la marca España y, a través de nosotros, el estado español se apropia indebidamente de la ciencia que otros países financian.

Resulta irónico que el antiguo ministro de Ciencia y Tecnología Josep Piqué, del partido actualmente en el Gobierno, dijera en 2003 que había muchos más científicos extranjeros trabajando en España que españoles en el extranjero, enormidad que fue desmentida en una carta a la prestigiosa revista Science (4 abril 2003, vol. 300, p. 51) firmada por más de 2700 investigadores españoles en el extranjero. Ahora que el gobierno español ha decidido acabar con la investigación científica por asfixia y que, incluso para él, el panorama científico para los próximos años se anuncia desolador, de repente se acuerda de nosotros como de Santa Bárbara. Y como, en efecto, somos muchos los científicos españoles en el extranjero, qué solución más natural que confiscar el producto de nuestro trabajo fuera de España.

No, señores, no. Yo entiendo que en el pasado España invirtió mucho en nuestra formación, que nos dio becas para estudiar, para hacer una tesis e incluso para salir a hacer una estancia postdoctoral a otro país. Lo reconozco y, personalmente, lo agradezco. Lamentablemente, la política científica en España siempre ha sido errática y miope. Aunque ha habido algún intento de limitar la fuga definitiva de cerebros a través de ciertas iniciativas, como los famosos contratos Ramón y Cajal, éstas han sido, debido a esa política a muy corto plazo y sin continuidad, ineficaces, por no decir incluso perjudiciales. En efecto, muchos científicos con una posición en el extranjero que decidieron volver abandonándola y que consiguieron un contrato de reincorporación a pesar de la endogamia y de tantas otras dificultades, se encuentran ahora abocados a un nuevo exilio tras pasar cinco años en España. Esto ya no es fácil cuando uno no es tan joven, ha formado una familia y ha ido relajando los contactos en el exterior.

Sí, soy española y me solidarizo profundamente con mis conciudadanos, escandalizándome con el nivel de corrupción y de descaro (allí no dimite ni dios). Me solidarizo con mis colegas científicos que resisten con estoicismo ante el naufragio del sistema investigador. Me apena y me indigna la indiferencia y la ligereza con que se trata a la ciencia en ese país. En tiempos de crisis lo mejor que se podría hacer es invertir en ciencia y tecnología para encontrar soluciones innovadoras. En lugar de ello, no sólo no se invierte, sino que se están alcanzando niveles muy peligrosos de inanición que pueden llevar al colapso completo a los sistemas educativo y de investigación. Entonces España habrá dilapidado inútilmente todo el dinero invertido y todo el potencial intelectual exportado graciosamente en forma de fuga de cerebros. Lo lamento, pero ello no hace más lícito el intento por parte de las autoridades españolas de apropiarse del trabajo que hacemos los españoles en el extranjero.
La investigación que yo hago es internacional, pero si tuviera que ser de alguien, sería francesa y europea, pues son instituciones francesas y europeas, pero no españolas, quienes la hacen posible. La ciencia que hacemos los cerebros fugados ya no pertenece a España. Si España quiere enorgullecerse de su ciencia, que la financie.

Purificación López García es directora de investigación del CNRS (Centre National de la Recherche Scientifique) en Francia y dirige un grupo de investigación sobre diversidad y evolución microbiana en el instituto de Ecologia, sistematica y evolución.

jueves, 6 de junio de 2013

LUZ SOBRE EL PASADO ROMANO DE FORMENTERA

Vista aérea del yacimiento de Can Blai © MAEF
Reproducimos el artículo de El Diario de Ibiza dedicado al proyecto de Can Blai, "Luz sobre el pasado romano de Formentera"

C. Convalia, Diario de Ibiza, 5 de junio de 2013

El MAEF y la Universidad de Niza excavarán el ´castellum´ romano de Can Blai (Formentera).

El Museo Arqueológico de Ibiza y Formentera (MAEF), junto con la Fundación de la Universidad de Niza Sophia Antipolis, llevarán a cabo entre el 8 y el 27 de julio la tercera excavación arqueológica del castellum romano de Can Blai (las dos primeras se realizaron por el MAEF en 1979 y 1980) con el objetivo de profundizar en su historia y en lo que significó durante la época del Bajo Imperio romano, entre los siglos II y IV después de Cristo.

Los responsables de la excavación son el director del MAEF, Jordi Fernández, y el profesor de Arqueología de la Universidad de Niza, Ricardo González Villaescusa, que cuenta con un prestigioso equipo de investigadores expertos en la época romana que intentarán responder a las preguntas que todavía sobrevuelan este vestigio de la historia de Formentera, del que se tiene muy poca información.

Esta fortificación, de tipo quadriburgium, era frecuente en ese periodo en el Mediterráneo. Se trata, en este caso, de un recinto cuadrangular, de pequeñas dimensiones, dotado de torres de ángulo que se levanta a escasa distancia del camí vell de la Mola y al que se accede a la altura del kilómetro 10 de la carretera principal de la isla. Precisamente al otro lado del camí vell se conservan los restos de una antigua cisterna romana, cuya función, con toda probabilidad, era proporcionar agua a los posibles ocupantes del castellum.

Fernández explica que cuando hace 30 años se realizaron las dos primeras campañas, quedaron pendientes determinados trabajos «por razones económicas», ya que el objetivo era ampliar el área de excavación exterior, así como la totalidad del interior de la estructura, por lo que se dejó abierta la investigación.

Añade el director del MAEF que Ricardo González Villaescusa, que ya excavó en Can Blai en 1980, le propuso la iniciativa al haber logrado la financiación mediante la fundación de dicha universidad y de un mecenazgo privado: ´Can Blai. Un fortín bajo imperial de vigilancia costera en el Mediterráneo Occidental´, que cuenta con el apoyo del área de Patrimonio del Consell de Formentera. Fernández resume la excavación como un trabajo para «sacarle todo el jugo al yacimiento de Can Blai».

Las incógnitas

González Villaescusa señaló por su parte que «se sabe muy poco» sobre esta fortificación y que se mantienen «dos grandes incógnitas» en torno a este yacimiento. «Una de ellas –detalló este experto– es la cronología, para ver si es algo de finales del siglo III, principios del IV, o de la época bizantina». El objetivo, agregó, es «definir claramente la fecha ya que la interpretación no sería la misma».

El segundo interrogante científico que plantea el proyecto está relacionado con «saber si el yacimiento fue terminado o no y si entró en uso». Estas dudas se basan en referencias bibliográficas de dos autores que sustentan la teoría de que la estructura está incompleta «al faltar nueve metros de muro en uno de sus lados», precisó.

El catedrático reconoce que la excavación se realiza gracias a su vinculación profesional con la citada universidad francesa y a que siempre se ha sentido muy cercano a las excavaciones realizadas en las Pitiüses, en las que participó, hace años, dirigiendo varias de ellas. Admite que en Francia resulta más fácil conseguir financiación para este tipo de proyectos que en España, a pesar de que la situación económica también afecta a la investigación de las universidades galas.

El proyecto de Can Blai tendrá además una importante parte divulgativa con varias publicaciones y artículos en revistas especializadas. De hecho, está previsto que el MAEF edite una monografía junto al Consell de Formentera en castellano. La propia Universidad de Niza lo hará en francés, y también en una revista en inglés. Además, se editará un video de carácter divulgativo sobre el trabajo realizado. Durante el periodo en el que dure la excavación se organizarán alrededor de una docena de conferencias públicas a cargo de los expertos del equipo y de otras universidades que se celebrarán en la sala de actos del área de Cultura del Consell. Se contepla además abrir una página web sobre los detalles de la excavación y sus resultados.

sábado, 1 de junio de 2013

Y LUIS TOSAR FUNDÓ VALENTIA

Ahora, cuando la antaño amplia panoplia de los intereses de la arqueología urbana valenciana, experimenta el reduccionismo espurio del cierre de foco de los mismos, ante el monotema recurrente de los mitos fundacionales de Valentia Edetanorum, recuperamos del río del olvido, el artículo publicado dos años atrás, por uno de nosotros.
 

Josep Vicent Lerma

Levante-EMV, 20 de abril de 2011


Décimo Junio Bruto, además de la denominación oficial de una desmemoriada plaza del cap i casal, aún sin rótulo metálico reglamentario, de diseño giboso, que muy pocos del vecindario sabrían ubicar realmente junto a la medieval de la Almoina, de nada recomendable traducción al valenciano, es el nombre del cónsul de la hispana provincia Ulterior, que en el año 138 a.C. fundó contra todo pronóstico en la distante demarcación Citerior la ciudad de Valentia, en el corazón del ancestral territorio ibérico, para asentar en ella a los soldados licenciados de las guerras sertorianas —mejor olvide el lector el peplum televisivo Hispania—, según relata el famoso historiador Tito Livio y reproduce grabada a cincel en la piedra desnuda, la ahora maltrecha losa conmemorativa fundacional de la Plaza de la Virgen, revival barroco postrero del arquitecto municipal Emilio Rieta: «D. Ivnivs Brutus cos. in Hispania, is qui sub Viriatho militaverant agros et oppidum dedit, quod vocatum est Valentia».

Hito originario al que en estas mismas páginas ya dedicamos el artículo «Dos mil ciento cincuenta años (MMCL) de Valencia» (Levante-EMV, 17-04-2010), animando en la medida de nuestras posibilidades a las fuerzas vivas valencianistas a la celebración comunitaria de tan fausto evento en el próximo año olímpico 2012. Horizonte en el que encajaría como anillo al dedo la superproducción gallega a protagonizar por Luis Tosar, precisamente encarnando a este mismo magistrado romano, que para sorpresa de muchos valencianos de a pie portaba como sobrenombre latino el de «Galaico», por sus victorias sobre los celtas «gallaeci», después de vadear el mitológico río del olvido Lethes (hoy Limia) en su expedición a los confines del mundo entonces conocido.

Sin embargo la Valencia de los edetanos no es la única urbe cuyo nacimiento se relaciona con Junio Bruto, pues también se le asocia con el origen de Brutobriga, probablemente en el lejano Cerro de la Botija de Villanueva de la Serena (Badajoz). Problemática histórica en la que no conviene olvidar las lecciones de la profesora Mª. José Pena, sobre el hecho de que las emblemáticas acuñaciones monetales valentinas, con el cuerno de Amaltea y los rayos jupiterinos, parecen inspiradas en la iconografía de un célebre denario de Quinto Fabio Máximo Eburneo del año 127 a.C., por lo que finalmente la puesta en marcha de la colonia latina fundada a orillas del Turia pudo ser en realidad una «cosa de familia», en este caso de la familia (gens) Fabia y los veteranos de los ejércitos sustentados económicamente por sus aristocráticos miembros, en cumplimiento de los designios del cónsul «Gallaecus».

Por todo ello y ahora que los hornos de fundición vuelven a echar chispas para conformar la figura en bronce de Juan Pablo II, nos atrevemos a recuperar la idea de la escultura del romano fundador de nuestra urbe, acompañado de la icónica groma de agrimensor, por qué no a falta de mejores rasgos conocidos, con los del noble actor gallego de «Los lunes al sol».

martes, 14 de mayo de 2013

EXCAVACIONES Y PROSPECCIONES EN CAN BLAI (FORMENTERA JULIO 2013)

Se abre el plazo de candidaturas de estudiantes de grado y postgrado para la intervención que realizaremos en la isla de Formentera en julio de 2013.

Toda la información necesaria en: http://www.cepam.cnrs.fr/can-blai/


El yacimiento de Can Blai (o también de Can Pins) se encuentra situado en la parroquia de Sant Ferran de ses Roques, en la isla de Formentera. Está emplazado casi en el centro de la isla, en el istmo que une los dos relieves mayores de la misma, a unos 600 m de distancia de la costa por su lado NE y a unos 900 m por su lado NW; y en su punto más elevado, a unos 20 m sobre el nivel del mar. Desde este emplazamiento es posible el control de las costas norte de Formentera y este de Ibiza, así como de las costas del sur de Formentera, zona invisible desde Ibiza.

El asentamiento es una fortificación de tipo quadriburgium, frecuente entre finales del siglo II y el siglo VI d.C. (Reddé 1995), un recinto cuadrangular de pequeñas dimensiones dotado de torres de ángulo. Se levanta a escasa distancia del llamado “cami vell” que cruzaba la isla en su longitud. Precisamente al otro lado de este camino se conservan los restos de una antigua cisterna, cuya función, con toda probabilidad, era proporcionar agua a los posibles usuarios de la fortificación. 

Proyecto

Una doble incógnita planea sobre la fecha de construcción y sobre el uso del campamento. El grueso de los materiales hallados durante las excavaciones ofrece un horizonte cronológico que, a falta del estudio definitivo, podemos situar en sincronía o algo posterior al vertedero de la avenida de España, 3 de Ibiza, que fue datado entre 240 y 260 d.C. (González Villaescusa 1990). Por otra parte, la tipología arquitectónica, la encontramos reproducida en otros fortines de semejantes o idénticas características del norte de África que han sido fechados en esa misma época o en época bizantina.

Otro interrogante que ofrece Can Blai es el pretendido carácter inconcluso propuesto por algunos autores debido a la ausencia de 11 metros del lienzo del muro SE, lo que les ha conducido a interrogarse sobre si realmente fue utilizado. Las implicaciones de estas cuestiones en la interpretación de los restos son fundamentales. Los materiales recogidos en excavación pueden ser residuales de un yacimiento que precedió a la construcción del castellum, y éste ser de época bizantina o bien, los materiales pertenecerían al uso del fortín y haberse podido construir a mediados o finales del siglo III o, ya en el siglo IV d.C.

La intervención que planteamos tiene, pues, un doble objetivo: la datación precisa del asentamiento y dilucidar su finalización y uso. La intervención arqueológica de 1979/1980 dejó una importante superficie del yacimiento sin excavar y, a pesar de la escasa estratigrafía conservada, se impone una excavación fina que resuelva la posible estratigrafía y las relaciones entre los estratos y las estructuras arquitectónicas. Otro aspecto de importancia en la caracterización cronológica del edificio es la tipología constructiva. La planimetría y el estudio arquitectónico permitirán perfilar las influencias constructivas y contribuirán a ubicar en el tiempo la construcción de Can Blai.

Conferencias de pública concurrencia
  • Conferencia sobre historia de la investigación en el yacimiento de Can Blai por el Dr. Jorge Fernández, director de las excavaciones de 1979 – 1981 y director del Museo Arqueológico de Ibiza y Formentera.
    Conferencia sobre las fortificaciones y la defensa del Imperio Romano en época de Diocleciano, a finales del siglo III d.C. por Michel Reddé, catedrático de arqueología romana de la Escuela Práctica de Altos estudios EPHE de París.
  • Conferencia sobre las fortificaciones bizantinas en Baleares por M. A. Cau Ontiveros, responsable de las excavaciones de Pollentia (Mallorca) y Research Professor de la Universitat de Barcelona.
  • Conferencia sobre el avance de las campañas de estudio de Can Blai por R. González Villaescusa catedrático de Historia Antigua y Arqueología de la Universidad Niza – Sophia Antipolis y de la UMR 7264.
  • Conferencia sobre Estructuras agrarias y colonización púnica en Ibiza (Baleares) por R. González Villaescusa, catedrático de Historia Antigua y Arqueología de la Universidad Niza – Sophia Antipolis y de la UMR 7264.
  • Conferencia sobre Dinámicas del paisaje en el bajo valle del Argens (Fréjus, Var) del Neolítico a época romana por Frédérique Bertoncello, CNRS-UMR 7642 – Université de Nice Sophia Antipolis.
  • Conferencia sobre De Archaeomedes a ArchaEpigraph: arqueología y epigrafía especial al servicio del studio de las dinámicas de población y de los territorios de la Antigüedad por Frédérique Bertoncello, chargée de Recherches del CNRS – UMR 7264 y Marie-Jeanne Ouriachi, profesor titular de Historia Romana de la Universidad Niza – Sophia Antipolis y de la UMR 7264.
  •  Conferencia sobre Cerámica romana en el Mediterráneo occidental en el siglo III d.C. por Alejandro Quevedo, Universidad de Murcia.
  • Conferencia sobre Inestabilidad y transformaciones en el siglo III d.C., de Carthago Nova a Can Blai por Alejandro Quevedo, Universidad de Murcia.
  • Conferencia sobre la Villa y la gruta de Tiberio en Sperlonga por Jean-Louis Paillet, CNRS – IRAA, Aix-en-Provence.
  • Conferencia sobre Geomática : Teoría y práctica por Gourguen Davtian, ingeniero de investigación CNRS, (GIS, Télédétection, GPS) – UMR 7264.
Bibliografía

domingo, 12 de mayo de 2013

EL BOLETÍN DE LA ASOCIACIÓN AGER SE CONVIERTE EN BLOG

La asociación AGER fue creada en febrero de 1991 para promover la investigación de la arqueología y de la historia rural de la Galia romana, poner en valor la imagen y estimular la investigación sobre esta temática. Con este objetivo, la asociación organiza un coloquio con periodicidad bianual cuyas actas son publicadas. Su carnet de investigación es un soporte de difusión de la información y de la actualidad científica así como un espacio de cooperación de los arqueólogos e historiadores que trabajan sobre el mundo rural galo-romano.


L'association AGER a été créée en février 1991 pour promouvoir la recherche dans le domaine de l'archéologie et de l'histoire rurales de la Gaule romaine, en valoriser l'image et stimuler les recherches en la matière. Dans ce but elle organise un colloque tous les deux ans, dont les actes sont publiés. Son carnet de recherche est un support de diffusion de l'information et de l'actualité scientifiques ainsi qu’un espace collaboratif pour les archéologues et historiens travaillant sur le monde rural gallo-romain.

The association AGER was created in February 1991 to promote research in the field of archaeology and history of rural Roman Gaul, to enhance its image and to stimulate research on this topic. The association organizes a conference every two year, which proceedings are published. Its blog is a medium for the dissemination of scientific informations and research news, as well as a collaborative space for archaeologists and historians working on the rural Gallo-roman world.


La Asociación AGER se renueva completamente proponiendo desde hoy su boletín de información anual en línea. Alojado en la plataforma Hypotheses.org, dedicada a la publicación en línea de “carnets científicos”, el blog AGER ofrecerá una mejor visibilidad a las actividades de la asociación y permitirá una mayor agilidad en la difusión de la actualidad de la investigación sobre el mundo rural galo-romano. Los “posts” (manifestaciones científicas, reseñas, noticias de yacimientos, presentación de proyectos científicos o de trabajos universitarios…) serán publicados al hilo de las novedades tras su aceptación por el equipo de edición.

Para publicar un texto basta con envíar un mail a uno de los miembros del comité editorial, que lo transmitirá al comité científico del blog.

Os dejamos navegar para ir descubriendo las diferentes secciones que se inspiran en el boletín de papel, si bien se adaptan a las posibilidades de esta herramienta (enlaces hacia otras web, foros de discusión…). Como veréis, algunas secciones se encuentran todavía “en construcción” por lo que hacemos un llamamiento a contribuciones para mantenerlas. Asimismo es una herramienta de diálogo: podéis reaccionar a los textos publicados compartiendo un comentario (que el equipo editorial moderará con posterioridad). Ha sido creada una sección de transmisión de conocimientos con la finalidad de plantear cuestiones, intercambiar información sobre temáticas diversas en torno a la arqueología rural galo-romana (una solicitud de información sobre un tipo particular de material, de hallazgo o de intercambio de bibliografía…). Es una herramienta colectiva. Y solamente sobrevivirá con las contribuciones de todos: os animamos a utilizarlo como medio de difusión de vuestros trabajos, de divulgación de aquellas manifestaciones científicas que organicéis o como tribuna de opinión sobre la actualidad científica.

Por último, queremos dedicar este blog a Jean-Luc Fiches, miembro fundador de la asociación AGER y editor del boletín de difusión anual durante más de diez años, hasta que confió la responsabilidad del mismo a dos de nosotros en 2004. Con este blog esperamos ser fieles a la curiosidad, apertura de espíritu y al espíritu colectivo de Jean-Luc.

¡Buena navegación!

El equipo editorial: Frédérique Bertoncello, Laure Nuninger, Bertrand Dousteyssier, Ricardo Gonzalez Villaescusa.

martes, 7 de mayo de 2013

MANTENER VIVO EL PASADO (15º TALLER DE ARQUEOLOGÍA PALEOAMBIENTAL)

Istmo de Formentera donde se encuentra el quadriburgium
Con tan sugerente título organizan su 15º Taller de arqueología paleoambiental la Facultad de Arqueología e Historia de la Universidad de Atenas y la American School of Classical Studies at Athens. Del que ofrecemos su programa para el próximo 14 de mayo. Allí, uno de nosotros mostrará el programa de excavaciones y prospecciones del mes de julio en el quadriburgium tardío de Can Blai (Formentera).
15th Workshop of environmental Archaeology «Keeping our Past alive»

Research group environmental Archaeology (Faculty of Archaeology and History National and Kapodistrian University of Athens) Wiener Laboratory of Archaeological Science (American School of Classical studies at Athens)


PROGRAM

16:00-16:15    REGISTRATION

16:15-16:30    Karali L., Fox S. C., Welcome word

16:30-17:15    Prof. Ricardo GONZÁLEZ VILLAESCUSA, keynote speake:“The late-Roman coastal small fort of can Blai (Formentera, Baleares)”

17:15-17:35  Dr. Georgios KAKAVA:“Memory and vision of the Museum of Numismatics”

17:35-17:50 Dr. Amalia PAPAIOANNOU:“Rediscovering the colours of Antiquity: 1700-1800”


17:50-18:00   Break.

18:00-18:20    Dr Sherry FOX:“Headshaping and Identity in the Eastern Mediterranean”

18:20-18:45    Prof. Lilian KARALI:“The Chronicle of purple”
18:45-19:00 Discussion-Proposals

Loring Hall, American School of Classical Studies (ASCSA), Souidias 59, Athens

J. Coleman, S. Fox, G. Kakavas, Z. Theodoropoulou-Polychroniadou, L. Karali, 
R. Gonzalez-Villaescusa & A.Papaioannou


lunes, 6 de mayo de 2013

ENTRADAS A LA MEZQUITA DE CÓRDOBA SIN PAGAR EL IVA


Cabildo catedralicio de Córdoba © F. J. VARGAS/El País
Transcribimos el destacado sobre las entradas a la mezquita de Córdoba del artículo aparecido hoy en El País sobre las inscripciones registrales de la iglesia (católica) posibles desde la liberalización del suelo en 2003. 

La pregunta que nos hicimos en noviembre de 2011 sigue vigente El patrimonio eclesiástico... ¿Es sagrado?


El País, 6 de mayo de 2013
Luis Gómez

Entradas a la mezquita de Córdoba sin pagar el IVA

Un ciudadano cordobés se preguntó un buen día de quién era la mezquita de Córdoba porque comenzaba a sospechar del comportamiento del obispado. La diócesis, dirigida por el recalcitrante Demetrio Fernández, un hombre de ideas muy conservadoras, había cambiado el nombre de la mezquita y denominado al lugar como Santa Iglesia Catedral de Córdoba. Había cambiado también los folletos para los turistas. En la denominación oficial, la Iglesia hacía el añadido, entre paréntesis, de “antigua mezquita” posiblemente para que nadie pensara que se trataba de otro lugar. El ciudadano acudió al registro y se encontró con la sorpresa: la mezquita era del obispado desde el 2 de marzo de 2006, que justificó la inscripción con el argumento de que era propiedad suya “desde tiempo inmemorial”. Inscribirla costó 30 euros.

Desde entonces hay circunstancias curiosas alrededor de la mezquita y su gestión por la iglesia. Instituciones como Cultura y la Junta de Andalucía que han invertido millones de euros en obras de mejora y mantenimiento, no reaccionaron a este hecho, a pesar de las quejas de colectivos como Europa Laica.

La diócesis no se hizo cargo de esas inversiones, pero sí de los ingresos que genera el monumento, que camufla como donativos y por los que no paga impuestos, puesto que en las localidades (al precio de 8 euros para quienes no están domiciliados en Córdoba) no consta la palabra “precio” ni, el desglose del IVA. La diócesis no aclara cuánto ingresa por la mezquita, el lugar más visitado de Córdoba.

La confusión es tal que alcanza a la difusión por internet. La página en apariencia oficial (mezquitadecordoba.org) es de agencias de viajes. La oficial es catedraldecordoba.es.

sábado, 4 de mayo de 2013

ODISEA ARQUEOLÓGICA A NINGUNA PARTE

Ruinas evocativas de la iglesia del antiguo Hospital General
Josep Vicent Lerma

Levante-EMV, 4 de mayo de 2013


En la película de los hechos recientes de la arqueología vernácula el ameno artículo periodístico "La arqueología pública toca fondo por la privatización de las excavaciones" (Levante-EMV, 20-01-2013) y la aparente entrevista de apostillas "Los arqueólogos privados no competimos con los públicos" (Levante-EMV, 28-01-2013), remachados ambos por la metafórica crónica de Alfons García "La arqueología ve volar también los fondos de Wert" (Levante-EMV, 25-01-2013), parecen jalonar y no precisamente de rosas, un camino de perdición para la escuela arqueológica valenciana, alumbrada felizmente en los años sesenta por la maestría del añorado Miquel Tarradell.

Escenario crepuscular en el que el zarpazo económico del hacendoso Montoro a los 494.500 euros de vellón de los proyectos arqueológicos españoles en el exterior del pasado año 2012, han acabado de aventar los empalagosos aromas a mamandurrias pompeyanas de las distantes excavaciones de las perfumerías romanas de la Vía de los Augustales de la ciudad del Vesubio, en la actualidad heredadas por el antes nuevo rico Instituto de Restauración (Ivacor), del perejil de todas las salsas, Carmen Pérez, ya que para fortuna viajera suya, Pompeya no quedó sepultada en las costas de Valencia.

Crónica a vuela pluma de la arqueología valenciana en la que Consuelo Matamoros jefa del Servicio de Patrimonio Cultural de la conselleria del ramo, aguó a las primeras de cambio de las V Jornadas de Arqueología de la Comunitat Valenciana (14,15 y 16 diciembre 2012) organizadas por la obsecuente Comisión de Arqueología del CDL de Valencia y Castellón, cualquier atisbo de esperanza sobre la publicación oficial de un irredento, desde 1998, Reglamento de Arqueología, en el mejor de los casos a suplantar algún día, todo lo más, por sucedáneos decretos parciales, relativos a materias concretas, al albur de una consabida discrecionalidad administrativa.

Todo ello con independencia de la extravagante y tardía firma, en relación con otras comunidades españolas más precoces como Castilla y León o Catalunya, del primer convenio colectivo específico del sector arqueológico, hoy en sus horas más bajas por el hundimiento del pechero sector inmobiliario, suscrito ya este mismo enero de 2013 entre el embrión de patronal empresarial Asemarq y el sindicato CC.OO., al margen claro está de los arqueólogos gubernamentales y liberales, devenidos en meros convidados de piedra para la ocasión.

Paisaje patrimonial para después de una batalla, como algunos quieren policatastrófico, en el que trapisondas mediáticas como la de la recuperación por el Seprona en la trastienda de un anticuario de El Campello de una supuesta tinajilla pintada con escenas de guerreros y figuras de animales salvajes, denominada por su decoración como de la "Suidomaquia", puesta en solfa en estas mismas páginas por la prudencia de la catedrática Carmen Aranegui en un lúcido "Interrogantes sobre el vaso ibero" (Levante-EMV, 9-01-2013), no vienen a paliar precisamente un acrisolado descrédito de la gestión pública de la arqueología de las tierras entre el Senia y el Segura durante estos últimos años.

Por consiguiente, en tanto en cuanto el patrimonio cultural valenciano en general y el arqueológico en particular, no deje de ser para sus actuales responsables burocráticos más que moneda de cambio, apenas calderilla en realidad, en este nuevo prosaico ciclo de políticas evidentes de recortes presupuestarios, como advertía el divino Dante, no nos engañemos: Lascia ogni speranza.